El repunte que el valor de la hacienda tuvo a causa del “dólar maíz” a $340, que llevó la cotización del cereal de los $49.000 que valía en las primeras semanas de julio a más de $60.000 en los últimos días, ya impacta de lleno en el valor que el consumidor paga por la carne vacuna en el mostrador.
Desde este lunes, comenzaron a registrarse incrementos de entre un 15% y 30%, según los diferentes cortes que se venden, en un contexto donde el precio de la carne vacuna se encontraba muy retrasado respecto a la inflación general.
Los matarifes, que comenzaron a sentir el impacto del encarecimiento de su materia prima, están entregando las medias reses en las carnicerías con aumentos de hasta $400 por kilo.
“Subió 100 pesos en promedio en el mercado de hacienda, 200 pesos la faena y 400 pesos en el mostrador”, aseveró el secretario general de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), Leonardo Rafael.
Principalmente, esta alza de los cortes bovinos se explica por la recuperación que tuvo la cotización de la hacienda en la última semana, y que representa la mitad del costo de la carne en los mostradores.
Según el índice de precios del Mercado Agroganadero de Cañuelas, los novillitos cerraron el viernes con valores promedios de $605 el kilo contra los $525 de una semana atrás, es decir un repunte del 15%. Mientras que los novillos terminaron en $603 el kilo versus los $491 del viernes anterior, lo que se traduce en un 22% de incremento, y la vaquillona trepó en $610 contra $505 del viernes previo, lo que significa un alza del 20%.