La Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) como la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) advirtieron sobre la pérdida de ingresos, estimada en US$ 6.500 millones, resultado de la reciente sequía y la baja de precios internacionales en soja y maíz. Mientras tanto, la BCR destacó que en tan solo dos meses, el valor de la producción agrícola 2024 sufrió una disminución de US$ 4.700 millones.
El informe de la BCCBA detalla que la sequía y la reducción de los valores de los commodities agrícolas llevaron a una drástica disminución de la rentabilidad esperada para los productores locales. Específicamente, en el caso de la soja de primera y el maíz tardío, con los actuales precios y rendimientos, la rentabilidad proyectada se vuelve negativa.
Adicionalmente, la BCCBA señaló que a la disminución en los volúmenes de cosecha previstos se sumó una reducción de US$40 por tonelada en el precio de exportación del maíz y de US$53 por tonelada para la soja. Esto resultó en una merma estimada de US$ 2.800 millones en los ingresos para la producción del cereal y de otros US$ 3.700 millones para la oleaginosa.
Además, la entidad cordobesa presentó un análisis detallado de la situación agrícola en Argentina, anticipando una campaña con desafíos y cambios en los ingresos del sector.
El análisis del Valor Bruto de Producción de soja proyecta ingresos en declive en comparación con la campaña anterior
A pesar de las expectativas de un volumen de cosecha superior al ciclo anterior, el Valor Bruto de Producción (VBP) proyectado para el maíz se sitúa alrededor de los US$ 10.200 millones, marcando un incremento de unos US$ 2.000 millones respecto al ciclo 2022-2023.
En contraste, la soja enfrentará un impacto más pronunciado debido a la disminución de los precios internacionales, estimándose un VBP cercano a los US$ 20.500 millones, ligeramente por debajo del promedio anterior de US$ 20.650 millones.
En este contexto, los especialistas de la bolsa destacan que, a pesar de los ajustes a la baja en las estimaciones de producción, tanto el VBP del maíz como el de la soja reflejan una reducción del 21% y 16%, respectivamente, desde las proyecciones realizadas en la época de siembra.
Asimismo, Agustín Vicari, economista de la BCCBA, señaló que, a pesar de estos recortes, se espera una producción nacional que aún presenta valores elevados, permitiendo vislumbrar una campaña agrícola positiva a nivel nacional.
En tanto, los precios FOB, que representan el valor recibido por la carga en los buques cerealeros, registraron una reducción del 20% en comparación con la campaña previa. Actualmente, la tonelada de maíz cotiza en torno a los US$180, mientras que en julio de 2023 se ubicaba en US$228.
En el caso de la soja, los valores han pasado de US$526 a US$413 por tonelada en el mismo lapso. Este escenario se suma a las condiciones climáticas adversas, con la ausencia de lluvias y altas temperaturas desde finales de diciembre hasta principios de este mes, afectando negativamente tanto los lotes con buenas expectativas como los rendimientos.
La Bolsa de Comercio de Rosario advirtió pérdidas de US$4500 millones en la exportación de granos
En tan solo dos meses, la producción agrícola del año 2024, sufrió una dramática caída, perdiendo la significativa suma de US$ 4.700 millones. Esta abrupta disminución se atribuye principalmente a la pronunciada baja en los precios internacionales de los commodities agrícolas, generando un impacto directo en el Valor Agregado Bruto de la cosecha 2023/24. La pérdida de ingresos por exportación de granos y derivados asciende actualmente a US$ 4.500 millones.
El año 2023 finalizó con un respiro para el sector agrícola, según lo indicado por los expertos Emilce Terré y Tomás Rodríguez Zurro, ya que las lluvias periódicas en el último trimestre pusieron fin a una de las peores sequías registradas en los últimos 60 años.
Sin embargo, la situación cambió drásticamente en los primeros dos meses de 2024. La ola de calor en febrero, no solo impactó negativamente en los rendimientos de la región, sino que también se sumó a una tendencia bajista en la cotización internacional de los commodities agrícolas. Esto dejó los precios de exportación argentinos un 35% por debajo de los niveles registrados en el mismo período del año anterior.
Como señalan en el análisis, el Valor Agregado Bruto del Agro (VAB Agro) para el año 2024 se estima, hasta el mes de febrero, en US$ 10.453 millones. Esta cifra, según su informe, representa una disminución de US$ 4.700 millones en comparación con las proyecciones realizadas en diciembre del año pasado.
En tanto, la BCR destacó que el 80% de la caída en el valor estimado de la producción se atribuye a la soja y al maíz. La ola de calor de febrero afectó el rendimiento previsto, recortando la producción en 4 millones de toneladas.
Además, la combinación de la disminución de precios para el productor y el aumento de costos ajustó significativamente el valor agregado, impactando este eslabón clave de la producción argentina.
A pesar de la fuerte recuperación post-sequía, el VAB Agro se proyecta como el segundo más bajo desde la campaña 2018/19, situándose casi un 20% por debajo del valor promedio del producto agrícola de los últimos cinco años.
Por último, con los precios actuales las exportaciones de granos y derivados se proyectan en US$31.300 para la campaña 2023/24, lo que refleja una caída de US$ 4.500 millones desde las proyecciones de diciembre. Aunque este ingreso de dólares superará al del año anterior debido a la sequía, al compararlo con el promedio de los últimos tres años, se encuentra un 18% por debajo.